La recepción fue en el patio de butacas, donde nos enseñaron el escenario, el telón y su espectaculares bordados, los palcos, y la enorme lámpara que ilumina toda la sala.
Uno de los momentos más especiales fue cuando pudimos acceder al Palco Real, donde aprovechamos para sentarnos en las butacas donde suelen estar el Rey y la Reina. Otro momento especial fue cuando accedimos a los salones que rodean toda la sala principal: allí conocimos la historia del edificio, observamos los cuadros de todas las personas importantes que han influido en la construcción y mantenimiento de este lugar; los tapices, mobiliario, instrumentos... y su fantástico restaurante, donde vimos parte del vestuario de la ópera "Aída".
Fue una experiencia muy buena, y que recomendamos para todas las personas que tengan curiosidad por conocer el Teatro Real.
María Bello y Sandra Blanco. 3º ESO C
Colegio Santísimo Sacramento (Madrid)
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